No hace tanto que exisitían en Córdoba dos lugares en los que había unos urinarios públicos subterráneos que parecían entradas a una estación de metro.
Uno de esos lugares es en la céntrica Plaza de las Tendillas en las que esos urinarios. En la última gran remodelación de la plaza, en 1999, se eliminó totalmente el tráfico rodado, se reorganizaron todos los puestos de periódicos, palomitas y de venta de cupones y lotería, adoptando todos un diseño similar, y desaparecieron los urinarios públicos que existían y fueron clausurados por razones de higiene pública y orden gubernativa.
Otros urinarios públicos similares se encontraban en la Plaza de Colón, junto a los Jardines de la Merced.